domingo, 11 de febrero de 2007

¡Sorpresa!


Si podemos hacer a alguien más alegre y feliz, deberíamos hacerlo en cualquier caso...
Por vosotras... un gran guiño...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si la gente dejara de pensar las 24 horas del día en su ombligo y se diera cuenta de la hermosura que le rodea, de todas las posibilidades de ser feliz que existen, y de lo poquito que hace falta para hacer feliz a los demás y así ser feliz tú mismo; otro rostro luciríamos, otros sentimientos experimentaríamos, otra energía nos invadiría, otra luz desprenderíamos. Yo no sé cuál será mi estrella, pero hoy sé que está junto a la tuya, y ambas pertenecemos a una constelación llamada "Princesas". Gracias.....