miércoles, 18 de abril de 2007

Ausencias...


6 comentarios:

Anónimo dijo...

"Aquellos que pasan por nosotros,
no van solos, no nos dejan solos.
Dejan un poco de si,
llevan un poco de nosotros"...

Y que gran verdad es. Que bonito abrir tu blog y encontrar esas palabras del autor de "tu Principito", porque si, en una noche cualquiera, en este pais cualquiera, en esta situacion azarosa que puede acabar de una forma cualquiera... encontrar, como decia, estas palabras tan significativas que me hacen sentirte tan cercana, alma mia, y sentiros a todos tan presentes, uno por uno... Una inyeccion de raices, recuerdos y sentimientos que por nada del mundo permitire que se diluyan en el tiempo y la distancia.

Y no sabes (o si) lo feliz que me hace que ese manojo de llaves te hayan abierto puertas a la serenidad y a la vez a esa magica y euforica inquietud... A la alegria con la que en estos momentos vives y que te despierta en mitad de la noche con tu mano entre las suyas.

Y no hace falta decir nada mas, ni lo que te extranho, ni lo que echo de menos esos momentos vividos en ese ultimo parentesis en Sevilla, ni nada de nada... Para que, si todo queda implicito desde aquel "hasta pronto"?

Un millon de besos desde la tierra de George Bernard Shaw...

Anónimo dijo...

Me dejan sin palabras todas ellas.
Como bien dices, Seele, Ausencias...
pero... ¡qué presentes están!
Besos,

Anónimo dijo...

Aún más grato es abrir el libro de las ausencias y descubrirte escrito entre sus líneas... En cuerpo sólo ausente... Yo llevo conmigo siempre una chapita que dice: "from de lost to the river"... en recuerdo de un paréntesis y en espera del siguiente...

Sigue allí sin dejar de estar aquí y cuéntame...
Te mando un pequeño adelanto de un gran abrazo...

seny dijo...

"from the lost to the river" es lo que cantamos siempre cuando salimos del casino.

Anónimo dijo...

Con los que han formado parte de nuestra vida, de nuestro tiempo, de nuestra historia, hemos compartido y nos han regalado parte de ellos, al igual que nosotros le hemos regalado parte de nosotros. Y creo que por ello siempre estarán en nosotros, en nuestro corazón. Qué bonito es poder experimentar eso, recordar y sentir a cada persona que pasa por nosotros, incluso cuando sabes que ya jamás podrás sentir su voz, su sonrisa, su calor, su abrazo...

Anónimo dijo...

Ese jamás es increiblemente triste. TEngo una amiga del blog, que perdio a su marido. Sus posts ultimos te rasgan el alma...pero nunca se van, cierto. Siempre quedan con nosotros.